Message from Bishop Jaime Soto on Proposition 1

Language: English | Spanish

Dear Friends in Christ:

“Proclaim the word; be persistent whether it is convenient or inconvenient.” (II Tim. 4.2) Taking St. Paul’s counsel to heart, we have been and will continue to be the voice of reason and hope for women and children, offering an alternative to the unbridled practice of abortion with the passing of Proposition One.

The long course of the eugenic ideology of abortion has plagued and poisoned the nation. Life, liberty, and the pursuit of happiness should not be denied to those deemed disposable. Ramming the expansion of abortion into our state constitution and making California a so-called "abortion sanctuary" makes the patient, persistent work of proclaiming the gospel of life more necessary. We reaffirm the many vital works of mercy to protect and promote the sanctuary that is the human family. We were born ready for this moment.

Against this lamentable ideological tide, with strong convictions we have held and will continue to hold to the undeniable truth of the dignity of the human life conceived in the womb, as well as the sanctity of life shared between mother and child.

I urge all of us to be the persistently joyful messengers of the gospel of life and the hopeful companions that children and their mothers need. Together, may we come to share in the fullness of life through Jesus Christ, our Lord.

Respectfully,

+Jaime Soto
Bishop of Sacramento


Mensaje del Mons. Jaime Soto sobre la Proposición 1

Estimados Amigos en Cristo:

"Proclamen la palabra; sean persistentes, ya sea conveniente o inconveniente". (II Tim. 4.2) Tomando el consejo de San Pablo al corazón, hemos sido y seguiremos siendo la voz de la razón y la esperanza para las mujeres y los niños, ofreciendo una alternativa a la práctica desenfrenada del aborto con la aprobación de la Proposición Uno.

El largo trayecto de la ideología eugenésica del aborto ha plagado y ha envenenado a la nación. La vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad no deben ser negadas a aquellos considerados desechables. Imponer la expansión del aborto a nuestra constitución estatal y hacer de California un llamado "santuario del aborto" hace que el trabajo paciente y persistente de proclamar el evangelio de la vida sea más necesario. Reafirmamos las muchas obras vitales de misericordia para proteger y promover el santuario que es la familia humana. Nacimos listos para este momento.

Contra esta lamentable marea ideológica, con fuertes convicciones, hemos sostenido y seguiremos sosteniendo la verdad innegable de la dignidad de la vida humana concebida en el vientre materno, así como de la santidad de la vida compartida entre mujer e hijo.

Les pido a todos que seamos mensajeros persistentemente gozosos del evangelio de la vida y los compañeros esperanzadores que los niños y sus madres necesitan. Espero que juntos lleguemos a compartir la plenitud de la vida a través de Jesucristo, nuestro Señor.

Atentamente,

+Jaime Soto
Obispo de Sacramento